MISSION ATLANTIC

MISSION ATLANTIC adopta un enfoque totalmente holístico e integrador para evaluar el estado de todo el Atlántico: no se excluye ningún componente de presión o de ecosistema. El alcance de las presiones incluye las actividades humanas, la variabilidad y los peligros naturales. Las evaluaciones integradas de los ecosistemas (AIE) las vinculan explícitamente a los componentes pertinentes de los ecosistemas. Esto proporciona un marco para una priorización basada en el riesgo de los vínculos entre las presiones y los componentes del ecosistema, y para orientar las actividades de investigación. Los vínculos entre las presiones y el estado de los ecosistemas se evalúan en el contexto de las presiones múltiples. Se utiliza el juicio de los expertos, el análisis de series temporales, la inferencia estadística, los modelos basados en procesos y los análisis de redes para puntuar cuantitativamente la importancia de esos vínculos. La capacidad de recuperación se cuantifica como un atributo clave de las redes socioecológicas. Este enfoque permite determinar las respuestas de los ecosistemas a las medidas de ordenación que contribuirán a la gestión y protección sostenibles de los ecosistemas y recursos marinos y costeros del Atlántico.

Objetivos

Para establecer los riesgos que plantean las presiones de las actividades humanas, el cambio climático y los peligros naturales, para el uso sostenible del ecosistema del Atlántico a escala mundial y regional, hemos definido cinco objetivos medibles en términos de excelencia científica y técnica (ST) y excelencia educativa y de divulgación (EO):

• ST1: Evaluar el estado de los ecosistemas y la resistencia en todo el Océano Atlántico a los efectos acumulativos y en escala cruzada de las presiones, y las consecuencias para el suministro de alimentos, la regulación del clima y los servicios culturales.
• ST2: Trazar un mapa del presente y establecer las futuras distribuciones en 3D de los biomas del Atlántico y sus presiones con respecto a los atributos físicos, biológicos, químicos y del fondo marino para apoyar el uso sostenible de los recursos marinos.
• ST3: Elaborar nuevos indicadores, instrumentos (modelos estadísticos y basados en procesos) y tecnologías (fusión de información, gran procesamiento de datos, aprendizaje automático) para identificar los riesgos y vulnerabilidades del Océano Atlántico en diferentes condiciones climáticas y escenarios de gestión.
• EO1: Formular y transferir directrices de evaluación, datos e instrumentos de modelización a los procedimientos de ordenación basados en los ecosistemas, a fin de apoyar la gobernanza sostenible de los recursos marinos y el desarrollo de la Economía Azul mediante la difusión, la creación conjunta de recomendaciones de ordenación y actividades más generales de sensibilización sobre los océanos en las que participen los interesados regionales (por ejemplo, las organizaciones no gubernamentales, la industria y los administradores de ecosistemas).
• EO2: Educar a los administradores de recursos oceánicos y a los investigadores en la aplicación de un enfoque sistémico a la gestión de los ecosistemas (por ejemplo, la AIE), ofreciendo oportunidades de desarrollo profesional y programas educativos con/en los países ribereños del Océano Atlántico Norte, Sur y Tropical