Las EATendencias son las tendencias del sector alimentario, las que nos ayudan a entender lo que sucede en el ámbito del consumo alimentario, nos dan pistas de los cambios en las necesidades, preferencias, creencias o comportamientos de las personas.
Este artículo lo dedicamos a la tendencia de lo saludable.
(El informe completo descargable está disponible aquí y la actualización de 2023 aquí, ambos solo para socios de AZTInnova, si no lo eres, puedes hacerte aquí).
El enfoque healthy lo invade todo
A medida que aumentan los problemas de salud relacionados con el envejecimiento de la población española, los consumidores buscan más activamente soluciones para su bienestar físico y mental.
El consumidor muestra un alto grado de interés por todos los temas relacionados con su salud y por saber más acerca del impacto real de los alimentos en su organismo.
Las personas tenemos grandes expectativas para extender y mejorar nuestras vidas a través de la comida, y la aceleración del proceso de digitalización ha impulsado a que cada vez más personas compartan datos personales con el fin de obtener productos/servicios personalizados y adaptados a su estilo de vida.
¿Cómo reaccionan los consumidores ante lo saludable como megatendencia?
A continuación, algunos datos de interés obtenidos de la encuesta realizada sobre una muestra de 2000 personas en el marco del proyecto Consumer Observatory impulsado por EIT Food.
- Buenos hábitos: Aproximadamente la mitad de la población tiene instaurados hábitos de vida saludables relacionados con actividad física, dieta y descanso.
- Salud emocional: El cuidado de la salud emocional y mental es un hábito menos instaurado, pero que genera creciente preocupación. Los más jóvenes son los que más cuidan este aspecto.
- Personalización: 7 de cada 10 personas aportarían sus datos para temas relacionados con su salud. El colectivo de menos de 34 años, el más predispuesto. Además, el cuidado preventivo va en aumento.
- Salud convenience: Predisposición a disponer de nuevos conceptos de productos de alimentación fáciles y rápidos de consumir, pero saludables. Consumo residual de sustitutivos de comidas principales (batidos energéticos, barritas, etc.).
