• En el marco del proyecto SOSCANO se ha propuesto la composición de un Comité Mixto que incorpora a los principales actores que intervienen más directamente en las pesquerías, incluyendo a usuarios, gestores, personal técnico y sociedad civil.
  • SOSCANO ha desarrollado, además, un sistema de indicadores de sostenibilidad económica, ambiental y social, que consensuados por el Comité Mixto, podrían ser la base de recomendaciones en la gestión de las pesquerías analizadas e influir en los procesos de toma de decisión.
  • La iniciativa cuenta con la colaboración de la Fundación Biodiversidad, del Ministerio para la Transición Ecológica, a través del Programa pleamar, cofinanciado por el FEMP.

(Sukarrieta, a 29 de enero de 2019) El proyecto SOSCANO ha promovido desde su comienzo, en enero de 2018, la creación y puesta en marcha de un Comité Mixto, compuesto por toda la diversidad de actores que intervienen en las pesquerías, con el objetivo de mejorar la gobernanza en la gestión de los recursos pesqueros y del caladero del Cantábrico Noroeste.

En este sentido, SOSCANO ha configurado un Comité Mixto integrado por catorce organizaciones a partir de una propuesta basada en la heterogeneidad de actores, legítimos, representativos y con diferentes intereses sobre los recursos pesqueros en el ecosistema marino: pescadores, personal científico, Administración Pública y ONGs de Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco.

Este Comité Mixto ha participado, de una manera consensuada, en el diseño y obtención de un sistema de indicadores sostenibles en términos económicos, ambientales y sociales. Así, se han identificado los puntos más fuertes y más débiles de las pesquerías piloto de raya y lubina en el Caladero Cantábrico Noroeste, lo que va a permitir proponer recomendaciones (no vinculantes) de cómo mejorar los valores de aquellos indicadores menos sostenibles y, por lo tanto, orientar la gestión de una pesquería hacia escenarios más sostenibles.

SOSCANO trata de mejorar la gobernanza en los procesos de gestión pesquera, contribuyendo a transitar desde los modelos de gestión centralizada (modelos tradicionales) a los modelos de gestión colaborativa. Sin embargo, serán necesarios más apoyos en el futuro para poder consolidar el modelo colaborativo que se propone.

 

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