• A iniciativa de las Asociaciones de Atuneros Congeladores (ANABAC y OPAGAC) y con el apoyo del Gobierno vasco, mantiene una oficina permanente en el puerto pesquero de Victoria (Mahé), en colaboración con la Autoridad de Pesca de Seychelles
  •  Realiza seguimiento sistemático de las pesquerías de túnidos tropicales, impulsa la creación de una base de datos integral y fomenta la capacitación de observadores locales.
  • Los trabajos desarrollados en la oficina permiten investigar de manera rigurosa las dinámicas de las poblaciones y sus relaciones con el medio, incluyendo principalmente sus interacciones con la pesquería.
  • La iniciativa, financiada por el Gobierno Vasco, se enmarca en las acciones que AZTI, junto con el sector atunero congelador, está realizando para garantizar la sostenibilidad a largo plazo de los recursos naturales a través de las mejores prácticas de explotación y gestión.

(Sukarrieta, a 25 de enero de 2018) AZTI apoya a la flota atunera de cerco tropical en el Océano Índico, de propiedad mayoritariamente vasca, desde su oficina en el puerto pesquero de Victoria, ubicado en Mahé, capital de Seychelles. La iniciativa, impulsada por las Asociaciones de Atuneros Congeladores (ANABAC y OPAGAC), financiada por la Viceconsejería de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno Vasco y que cuenta con la colaboración con la Autoridad de Pesca de Seychelles (SFA), busca, entre otras cosas, la recogida de datos pesqueros y muestras biológicas, la capacitación de los observadores a bordo y el apoyo al desarrollo de los sistemas de monitoreo electrónico que permitan garantizar una utilización sostenible y responsable de los recursos naturales en el Océano Índico.

El objetivo principal de la oficina permanente de AZTI en Seychelles es monitorizar sistemáticamente, integralmente y de manera científica la actividad de la flota española en el Océano Índico, con el fin de recolectar la información necesaria para mejorar la evaluación de las poblaciones de túnidos tropicales. Desde las instalaciones de Puerto Victoria se contribuye a una investigación rigurosa de las dinámicas de las poblaciones de atunes y sus relaciones con el medio, incluyendo sus interacciones con la pesquería.

Gracias a la continua comunicación con los barcos que se encuentran descargando en puerto, se obtiene información de capturas de especies objetivo y no objetivo, buenas prácticas a bordo (liberación de especies no objetivo altamente sensibles como tiburones, rayas y tortugas; y biodegradabilidad y propiedades antienmallantes de los dispositivos de concentración de pescado) o verificación del número de dispositivos concentradores de peces derivantes (DCPDs o FADs). Se toman datos, también, de los equipos de detección, comunicación y capacidad operativa de la pesquería.

Con el objetivo de dar respuesta al proyecto de la Comisión del Atún del Océano Índico (IOTC) sobre estructura poblacional de las especies de interés, la oficina permanente se encarga de centralizar y monitorizar las muestras recogidas por los observadores a bordo de los buques atuneros durante las mareas (otolitos, músculo y espinas), así como de las muestras que se recolectan en las conserveras, en tierra o en puerto, durante las descargas. La oficina ayuda a gestionar y organizar los envíos de las muestras a AZTI, donde se procesan y analizan para su estudio.

Asimismo, desde esta instalación de AZTI en Mahé se está procediendo a la capacitación de observadores de aquel país a bordo, cumpliendo estándares que les permitan acceder en un futuro a un programa regional. La recogida de datos mediante observadores es fundamental, principalmente para la verificación de las buenas prácticas.

Pesca del atún sostenible y responsable

Este proyecto, puesto en marcha en 2016 con el apoyo del Gobierno Vasco, se enmarca en las acciones que AZTI, junto con el sector atunero congelador, está realizando para garantizar la sostenibilidad a largo plazo de los recursos naturales a través de las mejores prácticas de explotación y gestión, sobre la base del mejor conocimiento científico.

En este sentido, la Asociación Nacional de Armadores de Buques Atuneros Congeladores (ANABAC) y la Organización de Productores Asociados de Grandes Atuneros Congeladores (OPAGAC) instauraron en 2012 un Código de Buenas Prácticas para mejorar la selectividad, incluyendo medidas que contribuyen a realizar una pesca del atún sostenible y responsable. A través de la aplicación de este código se pretende mejorar las maniobras realizadas en la pesca de cerco que se realiza con dispositivos concentradores de peces derivantes (DCPDs o FADs) en todos los océanos del mundo para mejorar la selectividad del arte y desarrollar una pesquería más responsable y sostenible que reduzca al máximo la captura incidental, especialmente de tortugas marinas y tiburones.

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